Éstos hallazgos de sustancias fueron ensayadas por 2 equipos liderados por Xian Zhang, profesor del Centro de Ciencia de la Escuela Nanotécnica en la Universidad norteamericana y divulgadas
en las revistas Nature y Science.Llamados de "metamateriales" tienen un efecto óptico de "índice de refracción negativo" que hace que la luz reflejada que pasa por ellos se desvía de manera incorrecta y su refracción negativo traspasa de su parte inferior hacia la superior sobre su superficie al objeto de su misma imágen quedando como halada en el espacio pero al revés.
Ésto se explica por la refracción al sumergir un lápiz en agua, éste se quiebra por
efecto de su "índice de refracción positivo" por causa de las ondas electromagnéticas que pasan de un medio a otro (aire-agua) pero al tener "índice de refracción negativo" la parte inferior del lápiz parece estar flotando en el aire por encima de la superficie del líquido.Otro grupo de investigación trabajaron con materiales controlando la radiación electromagnética con latitudes de onda mayor que al del ojo humano obteniendo con éstos "metamateriales" objetos con estructuras pequeñas de longitud de onda lumínica donde los "átomos" de los metamateriales de los circuitos de metal se absorben al irradiar la luz y dejan
reflejada su imágen en el espacio. Ésta longitud de onda de radiación electromagnética es del tamaño de sus átomos irradiados por el metamaterial en la luz visible con una estructura de un micrómetro (millonésima parte del metro).Así se logró disponer átomos en capas finas de metal con aislación de sal entre sí de 30 a 50 nanómetros de espesor y luego se usó un rayo iónico de alta energía que se hizo pasar por un prisma con índice de refracción negativo con longiud de onda cercano al infrarrojo como los usados en las fibras ópticas.
Los investigadores del segundo grupo usaron metamaterial con cables de plata de 60 nanómetros de espesor ( 200 veces más fino que un cabello) fueron alineados ordenadamente y se insertaron los cables en óxido de aluminio para conseguir un índice de refracción negativo con latitud de onda infrarroja de 660 nanómetros que permitió desviar la luz visible hacia atrás por primera vez provocando un manto de invisibilidad.
Las propiedades ópticas de los nanomateriales al variar el tamaño de los átomos en sus componentes metálicos permitirá desviar los rayos de luz alrrededor del objeto determinado para obtener el manto invisible del mismo.
ADN
Entradas
